Microservicios: todo lo que tienes que saber para aplicarlo e innovar en tu empresa

Gerardo Barbosa
21 de junio de 2021 · 8 min de lectura

El incremento de los sistemas en la nube cambió para siempre el enfoque tradicional en la creación de programas informáticos. La clásica arquitectura monolítica se aparta y abre paso a los microservicios, para ofrecer estructuras más modulares, escalables, seguras y a menores costos. ¿Qué es la arquitectura de microservicios y cómo ayuda a la innovación?

Históricamente, la manera en que las organizaciones diseñaron sus softwares y servicios informáticos fue mediante la arquitectura monolítica. Así, el código se estructuraba de manera tal que todas las funcionalidades quedaban dentro de un mismo programa. Al no haber separación entre los módulos, las distintas partes quedaban concentradas en un mismo sitio. Esta forma de trabajo fue la que imperó a lo largo del tiempo, y trajo algunas complicaciones a las empresas. Especialmente, cuando estas trataban de escalar, mantener sus servicios o incluso, innovar. 

Las desventajas de la arquitectura monolítica son varias, pero pueden resumirse de la siguiente manera: 

Pérdida de innovación, ya que al utilizar un único stack para todo, se desaprovechan otras tecnologías y metodologías disponibles. 

Falta de escalabilidad, porque al estar todo interconectado, expandirse es mucho más difícil. 

Caos en las nuevas versiones, dado que realizar mínimos cambios implica reversionar el programa por completo. 

Pequeñas fallas, grandes dolores de cabeza, ya que en general, si una parte de la aplicación monolítica no funciona, afecta a toda la operabilidad del sistema. 

Frente a estos desafíos surge la arquitectura de microservicios, pero ¿cómo puede esta nueva forma aportar a la innovación y a la reducción de costos?

La arquitectura de microservicios es un conjunto de pequeñas partes de código, que se ejecutan de forma independiente. De esta manera, las empresas pueden efectuar cambios en el software de manera simple y rápida cada vez que lo necesiten; o bien abordar cualquier problema de forma separada, sin afectar a otros procesos y sin necesidad de frenar la operación. Además, permite crear programas basados en distintos lenguajes, para crear las mejores soluciones que se ajusten a las demandas de los clientes. 

De acuerdo con un estudio de Statista, el 45% de las empresas encuestadas asegura que en 2021 sus aplicaciones de análisis de datos e inteligencia de negocio utilizan microservicios. Por otra parte, según la consultora Markets and Markets, para 2023 el mercado de microservicios ascenderá a 1,8 mil millones de dólares, lo que marca el franco crecimiento de esta tendencia de cara a los próximos años.

El mercado está definido por los usuarios y la verdadera diferencia es aprender a escucharlos. Aquellas compañías que pongan a sus clientes y prospects primero y luego elijan las mejores tecnologías para crear o innovar sus servicios serán las que más rápido alcancen el éxito. 

 

Ventajas de la Arquitectura de Microservicios

Si bien existen múltiples factores para optar por este método de desarrollo de aplicaciones, hay cinco razones principales para elegir la Arquitectura de Microservicios. ¡Empecemos!

Modularidad

Ya que se trata de servicios que funcionan de forma autónoma, cada una de las partes se puede crear y desplegar independientemente unas de otras. Esto, además, permite que si ocurre algún error en un determinado servicio, no se vea afectada la disponibilidad del resto, lo que asegura la continuidad de la operatoria. 

Escalabilidad

Al ser una aplicación modular, perfectamente se puede escalar de manera horizontal cada una de las partes, según las necesidades de procesamiento y cómputo. 

Velocidad y versatilidad

Se pueden utilizar distintas tecnologías y lenguajes de programación. De esta manera, cada funcionalidad de la aplicación se puede adaptar o crear de maneras más adecuadas y rentables, lo que hace que las operaciones sean más ágiles. 

Aprovechar el talento

Al dividir las grandes tareas en pequeños servicios, es muy fácil crear grupos de trabajo en el que los desarrolladores operen en pequeños equipos enfocados. Esos pequeños equipos pueden llevar adelante desarrollos que no necesariamente tengan que estar a la par de los demás. Se pueden agregar nuevas funcionalidades y empezar a probarlas con los usuarios, antes de que otros equipos culminen su parte; o se puede empezar a desarrollar una funcionalidad nueva, completamente aislada, sin impactar a los demás grupos y hacer pruebas.

Reducción de costos

Ya que los microservicios, en general, son de tamaño reducido esto permite disminuir los costos de mantenimiento y actualización, sin tener que intervenir en toda la estructura. Además, por ejemplo, se pueden almacenar servicios en distintos servidores, aprovechando al máximo los espacios que antes quedaban ociosos. 

Pero esto no es todo. La arquitectura de microservicios se combina con DevOps (del inglés “development” -desarrollo-, y “operations” -operaciones-). Se trata de un conjunto de buenas prácticas que combina las operaciones de IT con el desarrollo de software y cuyo objetivo principal es acotar el ciclo de vida en el desarrollo de los sistemas, a la vez que permite un go to market más rápido y ágil. Las ventajas que tienen las compañías al combinar ambos elementos son muchas, pero se destacan: una mayor velocidad para la creación de programas y aplicaciones; menor tiempo para resolver incidencias; mayores niveles de seguridad; y entornos más colaborativos.

 

¿Cómo saber si la Arquitectura de Microservicios es la mejor solución para mi empresa?

Para elegir una u otra manera de crear (o incluso, apostar por una combinación de ambas) el primer paso es determinar cuál es la mejor solución tanto para resolver las necesidades de la organización como para conseguir los objetivos. 

Un buen ejercicio para arribar a esta decisión es considerar algunos factores. La Arquitectura de Microservicios tiene más sentido: 

  • Si la audiencia del producto o solución es grande y diversa; 
  • Si se pueden producir picos en el consumo;
  • Si existen equipos técnicos con capacidades complementarias; 
  • Si los servicios necesitan rápidamente ser escalados e innovados. 

En adición, es fundamental considerar el número de usuarios finales, la cantidad de peticiones que se procesan, o los picos de demanda. 

Sin importar si se trata de sistemas en la nube, on premise, o tecnologías open source o no, en Multiplica podemos ayudarte en la migración hacia una arquitectura de microservicios. Para eso, nos enfocamos en el trabajo estratégico que ayude a tu compañía a dinamizar sus arquitecturas. 

Transformar las aplicaciones monolíticas en microservicios y estar al día con la innovación puede ser desafiante para la mayoría de las organizaciones. Por eso, te invitamos a contactar con Gerardo Barbosa, nuestro CTO para Región Centro (España, Italia, Francia y Portugal) en Multiplica, quien podrá guiarte en el camino de la evolución. 

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